Menegroth también llamada “las Mil Cavernas”, fue una importante ciudad élfica fundada por los sindar en el bosque de Doriath durante las Edades de las Estrellas. Era el palacio-fortaleza del rey Thingol y la reina Melian la Maia, desde donde gobernaban todo su reino.
Historia[]
Edades de las Estrellas[]
Durante las Edades de las Estrellas, cuando el rey Elwë regresó con su pueblo junto con Melian, su nueva reina, los elfos sindar fundaron el reino de Doriath, allí el rey, ahora llamado Thingol, mandó edificar por los enanos de Belegost la ciudad-fortaleza que se conoció como Menegroth, “las Mil Cavernas” en sindarin. Esta ciudad secreta se encontraba en lo más profundo del bosque de Doriath excavada en las salientes rocosas de la ribera meridional del río Esgalduin. Si bien todo Doriath estaba protegido por el sortilegio llamado la Cintura de Melian, el cual impedía que pudiesen entrar las incursiones de orcos, la ciudad también tenía como método de defensa un único puente de piedra sobre el río por el cual acceder a ella.
Debido al gran amor que sentían los sindar por los bosques, las estancias de Menegroth estaban esculpidas de modo que sus paredes simulaban grandes árboles y estaban repletos de animales y aves de piedra tallados en ellas. Se cuenta que también había hermosas fuentes y lámparas de cristal que adornaban el lugar.
Primera Edad del Sol[]
Con la llegada de Morgoth y sus perseguidores noldor a la Tierra Media, se inició lo que se conocería como Las Guerras de Beleriand. Gracias al poder del sortilegio de Melian, Menegroth estuvo a salvo de la destrucción causada por los enfrentamientos que se llevaron a cabo en toda Beleriand y prosperó mientras todos los demás reinos élficos caían. Sin embargo cuando el rey Thingol obtuvo el silmaril, la maldición de este cayó sobre todo Doriath y pronto comenzaron a sobrevenirle males. Cuando Thingol pidió a los herreros enanos de Nogrod que engarzaran el silmaril al collar llamado Nauglamír, estos, llenos de codicia, asesinaron al rey Thingol dentro del mismísimo Menegroth y saquearon la ciudad, aunque luego fueron detenidos y asesinados antes de lograr escapar.
Esto provocó que la reina Melian abandonara la Tierra Media para siempre llena de una profunda tristeza. En consecuencia el sortilegio que protegía Doriath se desvaneció y la ciudad, ahora sin reyes, permaneció indefensa ante sus enemigos. Luego de esto Menegroth fue saqueada una vez más por los elfos noldor, quienes, furiosos, fueron en busca del silmaril el cual creían que les pertenecía por derecho propio. Tras estos acontecimientos los sindar se fueron de Menegroth y la ciudad permaneció abandonada hasta hundirse junto con el resto de Beleriand al finalizar la Primera Edad del Sol.