Mapa del Helcaraxë, uniendo los extremos septentrionales de Aman y la Tierra Media.
Helcaraxë, también conocido como El Hielo Crujiente, era el nombre que recibía el estrecho de hielo que unía por el extremo norte los continentes de Aman y la Tierra Media, antes de los grandes cambios que se producieron en Arda a finales de la Primera Edad del Sol.
Se trataba del único paso por tierra firme que conectaba el Reino Bendecido y la Tierra Media, pero el clima extremadamente frío y la peligrosidad de los icebergs que presentaba hacían que casi nadie se aventurase a cruzarlo. Es posible que el clima polar del Helcaraxë fuese producido por Melkor, que tras las Montañas de Hierro generaba a su antojo un tiempo helador que se extendía por el norte de la Tierra Media.
Etimología
Se sabe relativamente poco sobre el origen del topónimo Helcaraxë, pero se cree que proviene del Quenya, en una deformación de la palabra karakse, que significa literalmente "borde afilado", en referencia a la forma afilada que solían tomar los icebergs del estrecho.
Historia
Edades de los Árboles
Es posible que el Helcaräxe se formara después del derribamiento de las Dos Lámparas de Valinor por parte de Melkor, en el que Arda perdió la simetría y los contientes se desplazaron. Melkor, que por entonces habitaba en su fortaleza de Utumno, irradiaba un clima helador alrededor de sus dominios, y es posible que él mismo congelara el estrecho de mar que separó por el norte Aman y Endor (la Tierra Media), formándose así el Helcaräxe.
Edades del Sol
Primera Edad
Una vez Melkor se liberó de su cadena en Aman y escapó del Reino Bendecido, se reunió con Ungoliant, la araña gigante, y envenenó con su ayuda a Telperion y Laurelin, los Dos Árboles de Valinor que iluminaban el mundo por entonces, que murieron por la tela oscura de Ungoliant. Melkor aprovechó la confusión causada en Valinor para robar a los Silmarils de Fëanor. Para escapar de Aman y de los Valar, Melkor y Ungoliant viajaron hacia Araman, en el nordeste del contienente, y allí cruzaron el Helcaraxë para huir al norte de la Tierra Media, donde se encontraba Angband, la segunda fortaleza de Melkor.
Turgon y Elenwë entre los Noldor dirigidos por Fingolfin que atraviesan el Helcaraxë.
Fëanor, enfurecido por el robo de Melkor, le dio un nuevo nombre, Morgoth, que significa "enemigo oscuro", y rápidamente emancipó a los Noldor de Tirion para navegar hacia la Tierra Media para declararle la guerra a Morgoth y recuperar los Silmarils. Sin embargo, abandonó al pueblo de Fingolfin, su hermanastro, y éste, para seguirle, no tuvo más remedio que cruzar el hielo del Helcaraxë para conseguir llegar a la Tierra Media. El viaje fue terrible, y el frío asoló a Fingolfin y a su pueblo. Cuando al fin llegaron a la Tierra Media, el Sol y la Luna ya habían sido concebidos y muchos Elfos seguidores de Fingolfin habían perdido la vida congelados o cayendo en las grietas de los icebergs. Entre los perdidos durante la travesía del hielo se encontraban Elenwë, la esposa de Turgon.
Al final de la Primera Edad, tras la Guerra de la Cólera, los Valar volvieron a transformar Arda: la tierra de Beleriand se hundió bajo las aguas del Mar de Beleager, y por consiguiente, el antiguo estrecho que separaba los dos antiguos continentes ya no fue estrecho, sino mar abierto. Se desconoce, pero, si la zona siguió congelada en las siguientes Edades o fue navegable.
Geografía
El Helcaraxë se situaba en una estrecha franja del Mar de Beleager, en el punto en el que las costas septentrionales de Aman y la Tierra Media casi llegaban a unirse, en su punto más próximo entre ambas. Desde la parte de Aman, el Helcaraxë arrancaba desde la región de Araman, unas tierras desoladas situadas entre el linde noroccidental de las montañas Pelóri y la costa nororiental del Reino Bendecido. El Helcaraxë continuaba así de oeste a este hasta desembocar en el extremo más noroccidental de la Tierra Media, situado en la región de Lammoth, al noroeste de Beleriand. Se desconoce a qué distancia se encontaraban ambas costas, pero es posible que estuviera cerca de las 500 millas.
El clima en Helcaraxë era extremadamente frío, de tipo polar, y en él se formaban gran cantidad de icebergs afilados y formaciones de hielo que en ocasiones fregaban entre ellas y producían crujidos en el hielo. Las tormentas de nieve eran abundantes, y las temperaturas se encontraban siempre bajo cero.