Castamir el Usurpador, usurpó el trono de Gondor, hasta que fue derrocado violentamente en la Batalla de Erui por Eldacar.
El bisnieto de Calmacil, Castamir no estaba en línea para el trono, pero su fondo real le había hecho el Señor de los buques en el marco del anterior rey, Valacar. Su linaje e influencia lo dejó en una posición para desafiar al actual rey, Eldacar, el cual tenía sangre mezclada. Como hijo único del rey Valacar, Eldacar era el heredero legítimo al trono, pero el hecho de que no tuviera sangre real llevó a algunos ciudadanos que creían que la sangre de Númenor debía ser mantenida a rebelarse. Aprovechando esto, Castamir fue capaz de incitar a la rebelión y asedió a Eldacar dentro de la ciudad de Osgiliath. La ciudad fue incendiada por las tropas de Castamir, destruyendo el famoso Domo de estrellas. Poco después, Eldacar huyó de la ciudad y se marchó a Rhovannion. Con la derrota del rey, Castamir se apoderó del trono.
Durante diez años gobernó Gondor con mano de hierro, mientras que Eldacar, poco a poco recuperaba poder. Castamir gobernó con crueldad, y cometió muchas maldades, incluyendo la ejecución del propio hijo de Eldacar, Ornendil. Al principio, la gente de Gondor lo toleró por su sangre númenóreana pura. Luego Castamir, ahora llamado "el usurpador", fue derrocado por su pueblo después de una década de gobierno malvado, y de esta manera Eldacar volvió al trono. Sufrió una importante derrota en la Batalla de Erui, donde perdió la vida a manos de Eldacar.