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Avari

Avari, que significa "Los Renuentes" en Quenya, son aquellos Elfos que rechazaron emprender la Gran Marcha a Valinor y permanecer para siempre en el Este de la Tierra Media. Forman con los Eldar, una de las dos grandes ramas en las que se divide la raza de los Elfos.

Los Avari por tanto no quisieron ir a vivir a las tierras imperecederas y permanecieron en el Este, aunque algunos migraron más tarde al Bosque Verde. Se dice que los Avari tomaron contacto con los hombres al poco de despertar y les enseñaron grandes cosas. Por eso, cuando los Edain se encontraron con Fingon, este pudo comprender parte de su idioma, pues tenía prestamos de las lenguas Avari.

Historia y Origen[]

Cuando los Elfos o Quendi despertaron en el Cuiviénen, pasearon por los bosques cercanos y se crearon los tres clanes. Permanecieron junto al Cuiviénen, pero las fuerzas de Melkor los encontraron primero y aquellos que se perdían por su cuenta eran secuestrados y llevados a Utumno dónde fueron corrompidos y transformados en la raza de los Orcos. Los Elfos sabían de algún ser que los secuestraba en la oscuridad, y por eso mismo cuando el Vala Oromë apareció ante ellos, estos se asustaron y algunos se escondieron al principio. Sin embargo, pronto se dieron cuenta de la buena naturaleza de Oromë, y los Elfos rapidamente salieron de sus escondites y se unieron a él.

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Oromë habló a los Valar de la existencia de los Elfos, y estos decidieron que por su seguridad, debían atacar a Melkor. Así pues le declararon la guerra y le vencieron, encarcelándolo por tres edades. Los Elfos entonces enviaron a tres embajadores a Valinor y regresaron para convencer a los suyos de partir al oeste. Todos los Vanyar, algo más de la mitad de los Noldor y la mitad de los Teleri aceptaron este viaje, mientras el resto de los Noldor y los Teleri rehusaron, y decidieron permanecer en la Tierra Media para siempre, en el Este del mundo. Los que aceptaron el viaje fueron conocidos como Eldar y partieron en la Gran Marcha a Valinor. Algunos completaron el viaje, pero otros se exparcieron y se asentaron después por Beleriand y las tierras de Eriador, asi como en las cercanias de las Montañas Nubladas en los Valles del Anduin. Estos son los principales elfos que aparecen en la obra de J.R.R Tolkien.

Por otro lado, fueron conocidos como Avari a aquellos que rehusaron seguir a los Valar tras su despertar en Cuiviénen, y no emprendieron, por tanto, el gran viaje hacia el oeste de la Tierra Media que protagonizaron sus congéneres. Por ello, permanecieron durante siglos apartados de los acontecimientos que se narran en la mayor parte de la obra de Tolkien.

Sin embargo, algunos Avari se unieron al final de la Primera Edad con el cambio del mundo y el hundimiento de Beleriand, a los Sindar y a los Nandor que permanecían en el Bosque Verde y el valle del Anduin, mezclandose con ellos. Este hecho dio origen a los grupos élficos que en El Hobbit  y en El Señor de los Anillos son denominados Elfos Silvanos.

El termino Moriquendi (Elfos negros o Elfos Oscuros) que engloba a todos los elfos que nunca vieron la luz de los Árboles llega a ser usado como sinonimo de Avari aunque no lo es pues tambien englobaria a los Sindar y los Nandor que tampoco vieron la luz de los dos árboles.

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